AUTODOMINIO EMOCIONAL
“No el que vence a
miles de enemigos en la batalla, sino el que se vence a si mismo, es el máximo
vencedor”
DHARMMAPADA
Buen día, hoy quiero compartirles
mis reflexiones acerca de los pensamientos internos que nos ocasionan conflicto
con nosotros mismos y que se reflejan negativamente en nuestras relaciones
personales.
El pensamiento que da forma a mi
reflexión está basado en la escritura Sagrada en verso atribuída a Buda
conocida como Dharmmapada (sánscrito) o Dhammapada (Pali) la cual forma parte del Canon Palí.
El ser humano libra infinidad de
batallas día con día de acuerdo con el entorno en el que se desenvuelve, y
acorde al rol que le toca desempeñar en este proceso llamado vida; en cada uno
de estos, nuestras emociones se disparan, algunas veces a favor y muchas otras
en contra nuestra afectando desde nuestro simple estado de ánimo por haberse
arruinado un momento agradable hasta nuestra salud por convertirse en momentos
repetitivos y trocar en un motivo de sufrimiento, recordemos que existe el
dolor, que es físico y el sufrimiento que es de índole mental.
Sin embargo, el verdadero enemigo
que provoca nuestro sufrimiento no es aquel que a través de sus palabras o
acciones dispara una respuesta emocional condicionada por los apegos o
ignorancia en ciertos asuntos que nos incomodan y generan una respuesta
apasionada con alteración de nuestro estado de ánimo, sino que el verdadero
enemigo está en nuestro interior, en lo recóndito de nuestra mente es aquel que
hace que sintamos la pérdida de un ser amado, por muerte o por abandono, que
nos genera interpretaciones erróneas de la realidad, que nos lleva a
suposiciones que nos generan ansiedad o enojo aún sin que un evento no se haya
realizado. Este enemigo es nuestro EGO.
El llegar a dominar y controlar a
este amo que domina nuestras vidas a su placer y deseo, es un acto de verdadero
valor, esfuerzo, perseverancia y coraje que de concretarse llenará de verdadera
tranquilidad, placer y paz espiritual y por consiguiente de un atisbo
considerable de felicidad al ser humano que logre este dominio.
Pero, ¿Cómo se logra esto?,
realmente no es algo fácil ya que implica un conocimiento y aceptación de nuestro verdadero ser y del buda que hay en otros, observar la
realidad en su verdadera dimensión y un grado infinito de compasión y amor por
nosotros mismos y por los demás, aún si los consideramos nuestros enemigos.
Estas condiciones para lograr
nuestra paz las podemos alcanzar a través de lecturas positivas, encontrando
los mensajes ocultos entre líneas de los libros que elijamos leer, en el caso
de los budistas practicantes o de cualquier practicante de otras religiones, se
puede llegar a este dominio por medio del estudio de los Sutras o escrituras de la religión que fuere con la misma
recomendación de encontrar el mensaje oculto expresada al principio de este párrafo además de recomendar
ampliamente la práctica de lo leído, en el budismo no hay resultado sin acción,
así que aunque seamos eruditos en los Sutras, sin la práctica de estos no
tendremos avance en nuestro desarrollo de vida, ya sea este espiritual o
material ya que uno va aunado al otro, recordemos que a pesar de todo, los que
leemos este escrito pertenecemos a este mundo saha o material, todavía no
pertenecemos a ningún cielo de Buda por lo que tenemos que vivir desarrollando
nuestro espíritu sin descuidar nuestro cuerpo, que es el templo real de nuestras
creencias.
El dominio de nosotros mismos
eliminando, controlando o disminuyendo aquellas emociones que puedan afectar
nuestro estado de vida permitirá que disfrutemos de lo maravilloso que es estar
en este planeta, de lo sublime que es ayudar a otros seres humanos a alcanzar
estados superiores de conciencia que les permitan vivir mejor, sin sufrimiento;
nos permitirá disfrutar de las relaciones con nuestros prójimos, parientes,
hijos y nos será posible perdonar sinceramente con toda nuestra compasión y
benevolencia las acciones cometidas por la ignorancia de otras personas.
El ser conscientes de nosotros
elevará nuestra humildad, pues nos llevará a la tolerancia de los actos y
creencias de otros seres, nos hará capaces de defender nuestros derechos sin
caer en apasionamientos que degeneren en conflictos y por lo tanto en dolor y
sufrimiento y nos hará coherentes con nuestra creencias y prácticas.
Por todo esto, el conocimiento y dominio de nosotros mismos
nos encaminará a la iluminación y llenará nuestra vida de amor y felicidad y al final de ella con seguridad nuestro karma se verá disminuido y nuestro renacer,
en caso de darse, se hará en un mundo mejor, lleno de felicidad y, al menos con
un menor grado de sufrimiento.
Muchas gracias y
benditos sean.
cadhi2012@gmail.com.
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