martes, 19 de enero de 2016

EL INICIO DE CICLO

“SI ESTÁS ATENTO AL PRESENTE, EL PASADO NO TE DISTRAERÁ, ENTONCES SERÁS SIEMPRE NUEVO”
FACUNDO CABRAL

Bienaventuranza para todos, queridos amigos y lectores de este blog.
Retomo mis entregas deseándoles un infinito cúmulo de bendiciones para este nuevo ciclo que inicia esperando que culminen con éxito todos sus proyectos y que encuentren la paz interior para lograr un equilibrio permanente en todos los ámbitos de la existencia.
Hablo de este inicio de año como de un nuevo ciclo porque es lo que en realidad significa, en la antigüedad, nuestros antepasados tomaban como punto de partida el solsticio de invierno para agradecer por todo lo recibido y pedir por las buenas cosechas que traería el cambio de estación.
Así en nuestras vidas, lo que experimentamos son ciclos, etapas, momentos, en los que muchas veces dejamos las puertas abiertas incrementando el sufrimiento por las cosas pasadas, manteniendo el apego que tanto daño nos hace, otras veces, cerramos las puertas, los ciclos, agradeciendo por toda la enseñanza recibida y aprovechando lo aprendido para ser mejores personas en el nuevo período que a lo largo de 365 días significarán un reto a vencer.
El iniciar un nuevo período implica cambio, debemos revisar nuestros equipajes, nuestras cargas que hacen pesado el caminar y difícil el avanzar, evaluar  nuestras actitudes, nuestra tolerancia, nuestras relaciones para entonces vaciar nuestra mochila y aligerar la carga emocional, económica, y física o material, como quieras llamarle.
Aligerar nuestra carga emocional tendrá efectos benéficos en nuestra salud tanto física como mental y facilitará el camino para un despertar espiritual, si te consideras dentro del sendero, esta limpieza te ayudará a comprenderte mejor, a empatizar con los seres que te rodean, evitará que juzgues a la ligera a tus hermanos humanos, todos somos perfectibles, nadie es perfecto, de igual manera, el estar consciente de tus emociones incluyendo el todo, tanto las  negativas como las positivas, realiza el ejercicio tántrico de la unicidad de las cosas, abrirá tu mente hacia otros niveles de conciencia, expandirá tu entendimiento acerca de tu conducta, de tu tolerancia de tu aceptación, primero para contigo mismo y luego para los demás, no importa cuán avanzado te consideres en el camino espiritual, recuerda que la soberbia te lleva cuesta abajo en este pasaje.
Con relación a lo económico, muchos maestros y gúrus, afirman, y respaldo esta afirmación, que es muy difícil iniciar un camino espiritual cuando careces de lo mínimo necesario para subsistir, es difícil más no imposible.  El equilibrio económico te deja espacio para poder cultivar tu espíritu, para dejar que la semilla germine y tengas frutos espirituales realmente nutritivos, que tu cosecha espiritual sea abundante, lo suficiente para poder compartir con los seres que te rodean y aumentar tu siembra. Recomiendo para este ciclo un esfuerzo mayor en tu trabajo, en tus proyectos en tu desarrollo profesional, no importa al nivel en el que te encuentres en tu centro de labores, transmuta este esfuerzo en beneficio económico para poder gozar de tranquilidad en el momento de iniciar o continuar tu deambular por el sendero del espíritu; asimismo, es importante el sanear las finanzas, deshacerte del peso económico, de las deudas, de los apuros, simplificar la vida para equilibrar tu economía.  
Por último deseo referirme al aspecto físico o material, aquí hablo del templo, tanto el del interior como del exterior, ese maravilloso templo que es nuestro cuerpo, el único y verdadero templo, solo superado por el mundo y la naturaleza en que vivimos, este supremo  santuario desde el que podemos elevar nuestras plegarias y realizar nuestros anhelos, esta hermosa construcción que funciona como un laboratorio y ordenador como ninguno se ha inventado, somos únicos, somos hechos a la imagen del universo.
Este maravilloso templo del que hablo muchas veces está olvidado, no tiene el mantenimiento requerido no se le da la importancia debida y se enferma, se desgasta y acaba por derrumbarse, es decir se enferma y muere, pero no esa muerte digna que nos lleva a otros niveles de desarrollo espiritual, sino a esa muerte que nos hace lamentarnos de nuestra condición de seres humanos y en la mayoría de los casos renegar de la existencia en la que nos toca este momento.
Nuestro cuerpo es la joya más preciada, ya que sin él no tendríamos la oportunidad de elevar nuestro espíritu, es como el aire caliente que requiere del globo para poder elevar la materia, por tanto debemos estar conscientes de sus necesidades, de sus requerimientos, de lo que necesita para funcionar correctamente por el tiempo para el cual fue diseñado. Para ello, es menester una correcta alimentación acorde con los períodos de tiempo que nos toca vivir, en nuestras etapas de nacimiento, juventud, madurez, adultez  y senilidad, con los nutrientes convenientes y el ejercicio adecuado, esto nos permitirá mantener nuestro cuerpo útil, ágil y una mentalidad despierta, que unidas nos lleven por los caminos del tantra, la unión última que al final nos guiará hacia nuestro origen en el lugar que nos corresponda en ese vasto universo.
Si aún no hemos tomado consciencia de estos puntos, es el momento de hacerlo, de cuidar todos esos factores que permitan el desarrollo del ser como una unidad, donde sus partes se combinen y nos hagan poderosos en el sentido correcto del término.
Como siempre, es un placer compartir con ustedes estas entregas, gracias y hasta la próxima.
GAZA
(Gerardo Zetina)