“SI ESTÁS ATENTO AL
PRESENTE, EL PASADO NO TE DISTRAERÁ, ENTONCES SERÁS SIEMPRE NUEVO”
FACUNDO CABRAL
Bienaventuranza para todos, queridos amigos y lectores de
este blog.
Retomo mis entregas deseándoles
un infinito cúmulo de bendiciones para este nuevo ciclo que inicia esperando
que culminen con éxito todos sus proyectos y que encuentren la paz interior
para lograr un equilibrio permanente en todos los ámbitos de la existencia.
Hablo de este inicio de año como
de un nuevo ciclo porque es lo que en realidad significa, en la antigüedad,
nuestros antepasados tomaban como punto de partida el solsticio de invierno
para agradecer por todo lo recibido y pedir por las buenas cosechas que traería
el cambio de estación.
Así en nuestras vidas, lo que experimentamos
son ciclos, etapas, momentos, en los que muchas veces dejamos las puertas
abiertas incrementando el sufrimiento por las cosas pasadas, manteniendo el
apego que tanto daño nos hace, otras veces, cerramos las puertas, los ciclos,
agradeciendo por toda la enseñanza recibida y aprovechando lo aprendido para
ser mejores personas en el nuevo período que a lo largo de 365 días
significarán un reto a vencer.
El iniciar un nuevo período
implica cambio, debemos revisar nuestros equipajes, nuestras cargas que hacen
pesado el caminar y difícil el avanzar, evaluar
nuestras actitudes, nuestra tolerancia, nuestras relaciones para
entonces vaciar nuestra mochila y aligerar la carga emocional, económica, y
física o material, como quieras llamarle.
Aligerar nuestra carga emocional
tendrá efectos benéficos en nuestra salud tanto física como mental y facilitará
el camino para un despertar espiritual, si te consideras dentro del sendero,
esta limpieza te ayudará a comprenderte mejor, a empatizar con los seres que te
rodean, evitará que juzgues a la ligera a tus hermanos humanos, todos somos
perfectibles, nadie es perfecto, de igual manera, el estar consciente de tus
emociones incluyendo el todo, tanto las
negativas como las positivas, realiza el ejercicio tántrico de la
unicidad de las cosas, abrirá tu mente hacia otros niveles de conciencia,
expandirá tu entendimiento acerca de tu conducta, de tu tolerancia de tu
aceptación, primero para contigo mismo y luego para los demás, no importa cuán
avanzado te consideres en el camino espiritual, recuerda que la soberbia te
lleva cuesta abajo en este pasaje.
Con relación a lo económico,
muchos maestros y gúrus, afirman, y respaldo esta afirmación, que es muy
difícil iniciar un camino espiritual cuando careces de lo mínimo necesario para
subsistir, es difícil más no imposible. El
equilibrio económico te deja espacio para poder cultivar tu espíritu, para
dejar que la semilla germine y tengas frutos espirituales realmente nutritivos,
que tu cosecha espiritual sea abundante, lo suficiente para poder compartir con
los seres que te rodean y aumentar tu siembra. Recomiendo para este ciclo un
esfuerzo mayor en tu trabajo, en tus proyectos en tu desarrollo profesional, no
importa al nivel en el que te encuentres en tu centro de labores, transmuta
este esfuerzo en beneficio económico para poder gozar de tranquilidad en el
momento de iniciar o continuar tu deambular por el sendero del espíritu;
asimismo, es importante el sanear las finanzas, deshacerte del peso económico,
de las deudas, de los apuros, simplificar la vida para equilibrar tu economía.
Por último deseo referirme al
aspecto físico o material, aquí hablo del templo, tanto el del interior como
del exterior, ese maravilloso templo que es nuestro cuerpo, el único y
verdadero templo, solo superado por el mundo y la naturaleza en que vivimos,
este supremo santuario desde el que
podemos elevar nuestras plegarias y realizar nuestros anhelos, esta hermosa
construcción que funciona como un laboratorio y ordenador como ninguno se ha
inventado, somos únicos, somos hechos a la imagen del universo.
Este maravilloso templo del que
hablo muchas veces está olvidado, no tiene el mantenimiento requerido no se le
da la importancia debida y se enferma, se desgasta y acaba por derrumbarse, es
decir se enferma y muere, pero no esa muerte digna que nos lleva a otros
niveles de desarrollo espiritual, sino a esa muerte que nos hace lamentarnos de
nuestra condición de seres humanos y en la mayoría de los casos renegar de la
existencia en la que nos toca este momento.
Nuestro cuerpo es la joya más
preciada, ya que sin él no tendríamos la oportunidad de elevar nuestro
espíritu, es como el aire caliente que requiere del globo para poder elevar la
materia, por tanto debemos estar conscientes de sus necesidades, de sus
requerimientos, de lo que necesita para funcionar correctamente por el tiempo
para el cual fue diseñado. Para ello, es menester una correcta alimentación
acorde con los períodos de tiempo que nos toca vivir, en nuestras etapas de
nacimiento, juventud, madurez, adultez y
senilidad, con los nutrientes convenientes y el ejercicio adecuado, esto nos
permitirá mantener nuestro cuerpo útil, ágil y una mentalidad despierta, que
unidas nos lleven por los caminos del tantra, la unión última que al final nos
guiará hacia nuestro origen en el lugar que nos corresponda en ese vasto
universo.
Si aún no hemos tomado
consciencia de estos puntos, es el momento de hacerlo, de cuidar todos esos
factores que permitan el desarrollo del ser como una unidad, donde sus partes
se combinen y nos hagan poderosos en el sentido correcto del término.
Como siempre, es un placer
compartir con ustedes estas entregas, gracias y hasta la próxima.
GAZA
(Gerardo Zetina)