martes, 30 de julio de 2013

TRIKAYA O LOS TRES CUERPOS DEL BUDA

LOS TRES ASPECTOS DEL BUDA
“EL BUDA TIENE TRES ASPECTOS:  LA ESCENCIA O DHARMA KAYA; LA POTENCIALIDAD O SAMBOGHA KAYA Y LA MANIFESTACIÓN O NIRMANA KAYA”
SUVARNAPRABHASOTTAMARAJA SUTRA
(EL SUTRA DE LA LUZ DORADA)
Buenos y sagrados días tengan todos, la entrega de hoy tratará sobre los rasgos o características de El  Buda. Esto es, la peculiaridad que hace única a una persona, aquello que lo distingue de los demás, que lo hace diferente entre la multitud y que lo hace único ya que solo los Budas pueden manifestar estas peculiaridades. Este concepto igual se conoce como los Tres Cuerpos de Buda.
De acuerdo con la tradición Mahayana, de donde proviene este Sutra, una persona al alcanzar el estado de iluminación, adquiere en forma inherente la comprensión de la existencia de los tres cuerpos de un buda, estos cuerpos se manifiestan en diferentes niveles, lo que no significa que sean separados sino que están íntimamente relacionados unos con los otros. Este concepto está profundamente relacionado con el término budista conocido como “es pero no es” y tiene mucha relación con la vacuidad, aspectos necesarios de aprehender en nuestro recorrido hacia la iluminación, ya sea en esta u otras existencias.
La particularidad de esta enseñanza reside en un concepto sánscrito que se conoce como TRIKAYA, o los Tres Cuerpos, en la que se demuestra que un buda o cualquier ser humano, al alcanzar la iluminación en forma inherente verán al Buda, ya que el Buda es la Iluminación misma.
El Buda, tiene en si tres aspectos, dos de ellos se muestran en un plano de existencia sutil, imperecedera, sin referencias temporales y que se encuentran en todos los seres humanos como instrumentos de desarrollo,  mientras que el último se percibe en el mundo material, el mundo de la forma.
En síntesis, los Tres Aspectos del Buda son: Dharmakaya o cuerpo de la esencia; Sambhogakaya o cuerpo de la Potencialidad y Nirmanakaya o cuerpo de la Manifestación
DHARMAKAYA O LA ESENCIA: Se considera que es la Sustancia de la sabiduría misma, y, como sustancia no tiene color ni forma ni va o viene de alguna parte por lo que se encuentra en todas partes, es en sí un aspecto no originado e inextinguible, es decir sin principio ni fin, que se encuentra en todas partes, en todo momento y en todo lugar y se accede a él mediante la investigación de  nuestro propio ser.
Este estado es inmutable ya que es absoluto y no tiene límites creados por el tiempo o el espacio, es un algo que no se puede definir ya que no existe forma de definir algo que no tiene principio ni fin, y la única conceptualización posible se asocia con la pureza primordial.
La esencia de Buda lo llena todo y existe eternamente por encima del concepto humano o de las dudas acerca de Buda ya que es sustrato de todo fenómeno manifiesto y de todo ser sintiente siendo al mismo tiempo todo cuanto existe y nada a la vez.
Como se menciona al principio, este cuerpo es parte de todo ser humano y está al alcance de su comprensión siempre y cuando busque dentro de sí las respuestas, cuando se preocupe por aumentar su contemplación o meditación acerca de los principios trascendentales del ser, la persona irá descubriendo un universo maravilloso lleno de respuesta a sus dudas, sus inquietudes y a la vez no le dirá algo que pueda escuchar o ver.
La esencia de Buda nos rodea, está ahí para los que buscan con diligencia el camino, para los que se esmeran en generar méritos y utilizan las técnicas budistas para alcanzar al menos la comprensión de lo incomprensible a través de la meditación. Esta enseñanza tiene parecido a la utilizada por otras religiones con la diferencia que el budismo tiene como basamento la intuición, la razón y conocimientos de cinco mil años o más tiempo de antigüedad.
SAMBHOGAKAYA O CUERPO DE LA POTENCIALIDAD: Es a través de este aspecto que el Buda se manifiesta para aliviar el sufrimiento humano, hace votos, se vuelve asceta y revela su Sagrado Nombre.
Por medio de este kaya, se tiene un contacto permanente e intrínseco con la realidad representando la propia vacuidad, no como una negación de la existencia sino como un espacio de conciencia trascendental abarcando todas las apariencias que puedan presentarse en los aspectos masculino y femenino trascendiéndolos y dando lugar al conocimiento último.
Es una representación de nuestra capacidad de comunicación por lo tanto, es un medio hábil o vehículo de acción convertida en una manifestación determinada expresada de maneras distintas.
La percepción de este kaya es la de una mente purificada de todo condicionamiento limitante impuesto por la ambigüedad de conceptos o por los apegos y deseos. Es una energía de la mente propia insustancial y carente de existencia propia.
En este aspecto se tiene la oportunidad de enriquecer el cuerpo material a través de la adquisición de conocimientos, desarrollo de aptitudes o habilidades y un sinnúmero de cualidades de tipo positivo que está al alcance de cualquier ser humano con la determinación suficiente para,  al menos, lograr el control de las fuerzas de la mente conocidas como emociones ya que por medio de las prácticas budistas se integra y potencializan las aptitudes cognitivas
Es este  un medio que aumenta y perfecciona la capacidad de comunicación del ser a través de la palabra, recordemos que en sus  inicios el budismo se transmitió de manera oral, sin embargo, también se pueden perfeccionar otros medios comunicativos como: la intuición, la telepatía, la clarividencia o el poder del silencio  como medios no verbales.
Al desarrollar este cuerpo, los seres humanos pueden realizar el deseo de todo budista de lograr beneficios para los demás seres sintientes ya que al desarrollarse primero contarán con los conocimientos necesarios para transmitir las enseñanzas del camino medio y salvar por este conducto a innumerables seres del sufrimiento constante y mejorar sus niveles de vida, compasión y sabiduría.
NIRMANAKAYA O CUERPO DE LA MANIFESTACIÓN: Es en este cuerpo o nivel donde un Buda se materializa para poder transmitir sus enseñanzas, donde es posible mostrar que el cuerpo es mutable y por lo tanto envejece, enferma y muere, es donde se crea un vínculo físico entre el hombre y la Divinidad o Buda.
Al ser un vehículo físico se comprende la existencia de imágenes de  Buda que actúan como vínculos devocionales ya que el hombre necesita de un medio que transmita esa devoción al ser objeto de su fe, ello no importando a que creencia  religiosa se pertenezca. Esta es una necesidad, es algo innato en el humano, la certidumbre  de dirigir su devoción a algo como una imagen, un mandala, una escultura, y que esta devoción llegue hasta el objeto de su actuar, además, sirve de estímulo en el momento de concentrarse en un mantra como parte de una meditación verbal  para generar una energía mental que alcance la comunicación con el primer cuerpo o Dharmakaya, es decir con el todo, con la esencia del ser.  
Hasta la próxima entrega, gracias.
cadhi2012@gmail.com


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domingo, 14 de julio de 2013

ENFOQUE EN EL CAMINO MEDIO



PARA EL LOGRO DE LA ILUMINACIÓN

“NO TRATES DE CAMBIAR TU DEBER POR EL DE OTRO, NI DESCUIDES TU TRABAJO POR HACER EL DE OTRO. NO IMPORTA LO NOBLE QUE ESTE PUEDA SER. ESTÁS AQUÍ PARA DESCUBRIR TU PROPIO CAMINO Y ENTREGARTE A ÉL EN CUERPO Y ALMA.”

DHAMMAPADA 12:10

Buenos y sagrados días, les envío una reverencia en reconocimiento a la divinidad que reside en ustedes.

En esta ocasión, elegí esta enseñanza que se encuentra en el Dhammapada para hacer referencia a un problema que se suscita entre muchas personas, principalmente de las que viven en los llamados países en vías de desarrollo. 

Aunque la enseñanza va encaminada hacia la continuidad del camino medio entre los practicantes budistas, el trasfondo es perfectamente aplicable a nuestra situación de vida, al mundo cotidiano en el que nos desarrollamos fuera de nuestras creencias religiosas, las cuales muchas veces pasan a segundo término ante la presión del mundo civilizado actual, en donde perdemos la coherencia de nuestras prácticas místicas.

En un mundo donde trabajamos más de ocho horas al día y teniendo en cuenta el sentido de responsabilidad que varía de un ser humano a otro, a veces nos vemos forzados a realizar el trabajo de otro compañero llenándonos de responsabilidades y presiones que no nos corresponden para cumplir con una meta u objetivo empresarial, con esto no quiero decir que nos neguemos al trabajo en equipo, ya que este facilita la labor en vez de complicarla, sino que debemos ser asertivos con nuestro desempeño laboral y aceptar las responsabilidades correspondientes a nuestra función sin permitir presiones por hacer la labor que les corresponde a otros. 

Es debido a estas presiones que se reciben, principalmente  de tipo material, que descuidamos nuestro verdadero sentido del ser o misión en nuestra vida, pero no la misión de trabajador, sino la que nos corresponde como ser humano. Al perder de vista nuestra misión, perdemos de vista nuestro futuro, es decir perdemos el rumbo, nuestra visión, nuestra realización o nuestra felicidad y nos sumimos en un mundo de sufrimiento y pesar culpando a otros de nuestra desdicha sin buscar en nuestro interior la respuesta a esta congoja.

En un sentido religioso, ¿Cuántos seres humanos navegan en el océano de las creencias religiosas practicando una u otras al mismo tiempo pero sin sentido ni congruencia en sus actos?, esta diversidad de creencia los hace desviarse del camino original que decidieron tomar en un momento determinado de sus vidas, luego estas personas se pasan su existencia preguntándose por que los practicantes de otras religiones, cualquiera que estas sean, son más felices o viven contentos o en un mundo de ilusión positiva. 

La respuesta es que estas personas han descubierto su camino y se han enfocado a él, se entregan de cuerpo y alma para lograr la felicidad prometida sea cierta o no,(¿quién lo puede afirmar o negar?), para alcanzar el paraíso espiritual que sus guías les han prometido, porque tienen fe absoluta y sin reservas en su creencia y cumplen con los votos comprometidos para su salvación espiritual. 

Sin embargo, este principio igualmente aplica a todas nuestras actividades mundanas, cuando el hombre se encuentra enfocado en su objetivo, es casi seguro que lo logra a menos que se interponga un obstáculo insalvable, como la muerte misma, no obstante, el enfocarse en algo, sea espiritual o material no es tan fácil como se dice, el hombre o mujer requiere de mucha reflexión, meditación, internarse dentro de su ser para poder definir su camino, buscar el adecuado o cambiar de vía, de esta manera, cambiará su vida y los resultados al final de ella serán satisfactorios tanto para el que se va como para los que se quedan.

Cuando el camino está perfectamente elegido, se acepta y se disfruta, las cosas necesarias para continuar en ese camino se dan de manera inherente, aparecen de la nada para facilitar el desplazamiento hacia un resultado feliz, o al menos, con un mínimo de sufrimiento dependiendo del karma y el nivel de práctica de cada persona. 

Dentro de la práctica budista, lo más importante para el practicante laico que no ha tomado votos de ninguna clase, o bien, tiene los votos del practicante laico, es mantenerse en el camino medio, por su propio despertar, esto no significa que no sienta compasión por otro ser humano, o bien que deje de preocuparse o sentir caridad por los demás, sino que debe comprender que nadie puede lograr la iluminación o alcanzar la felicidad por otra persona. Esto es hacer el trabajo por otro, recordemos que nadie puede ayudar a alcanzar el nirvana a otras personas si ni siquiera es capaz de pensar en su propia iluminación.

Benditos sean
cadhi2012@gmail.com
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lunes, 8 de julio de 2013

AUTODOMINIO EMOCIONAL

AUTODOMINIO EMOCIONAL

“No el que vence a miles de enemigos en la batalla, sino el que se vence a si mismo, es el máximo vencedor”
DHARMMAPADA

Buen día, hoy quiero compartirles mis reflexiones acerca de los pensamientos internos que nos ocasionan conflicto con nosotros mismos y que se reflejan negativamente en nuestras relaciones personales.
El pensamiento que da forma a mi reflexión está basado en la escritura Sagrada en verso atribuída a Buda conocida como Dharmmapada (sánscrito) o Dhammapada (Pali) la  cual forma parte del Canon Palí.
El ser humano libra infinidad de batallas día con día de acuerdo con el entorno en el que se desenvuelve, y acorde al rol que le toca desempeñar en este proceso llamado vida; en cada uno de estos, nuestras emociones se disparan, algunas veces a favor y muchas otras en contra nuestra afectando desde nuestro simple estado de ánimo por haberse arruinado un momento agradable hasta nuestra salud por convertirse en momentos repetitivos y trocar en un motivo de sufrimiento, recordemos que existe el dolor, que es físico y el sufrimiento que es de índole mental.
Sin embargo, el verdadero enemigo que provoca nuestro sufrimiento no es aquel que a través de sus palabras o acciones dispara una respuesta emocional condicionada por los apegos o ignorancia en ciertos asuntos que nos incomodan y generan una respuesta apasionada con alteración de nuestro estado de ánimo, sino que el verdadero enemigo está en nuestro interior, en lo recóndito de nuestra mente es aquel que hace que sintamos la pérdida de un ser amado, por muerte o por abandono, que nos genera interpretaciones erróneas de la realidad, que nos lleva a suposiciones que nos generan ansiedad o enojo aún sin que un evento no se haya realizado. Este enemigo es nuestro EGO.
El llegar a dominar y controlar a este amo que domina nuestras vidas a su placer y deseo, es un acto de verdadero valor, esfuerzo, perseverancia y coraje que de concretarse llenará de verdadera tranquilidad, placer y paz espiritual y por consiguiente de un atisbo considerable de felicidad al ser humano que logre este dominio.
Pero, ¿Cómo se logra esto?, realmente no es algo fácil ya que implica un conocimiento y aceptación de nuestro verdadero ser y del buda que hay en otros, observar la realidad en su verdadera dimensión y un grado infinito de compasión y amor por nosotros mismos y por los demás, aún si los consideramos nuestros enemigos.
Estas condiciones para lograr nuestra paz las podemos alcanzar a través de lecturas positivas, encontrando los mensajes ocultos entre líneas de los libros que elijamos leer, en el caso de los budistas practicantes o de cualquier practicante de otras religiones, se puede llegar a este dominio por medio del estudio de los Sutras o escrituras de la religión que fuere  con la misma recomendación de encontrar el mensaje oculto expresada al principio de este párrafo además de recomendar ampliamente la práctica de lo leído, en el budismo no hay resultado sin acción, así que aunque seamos eruditos en los Sutras, sin la práctica de estos no tendremos avance en nuestro desarrollo de vida, ya sea este espiritual o material ya que uno va aunado al otro, recordemos que a pesar de todo, los que leemos este escrito pertenecemos a este mundo saha o material, todavía no pertenecemos a ningún cielo de Buda por lo que tenemos que vivir desarrollando nuestro espíritu sin descuidar nuestro cuerpo, que es el templo real de nuestras creencias.
El dominio de nosotros mismos eliminando, controlando o disminuyendo aquellas emociones que puedan afectar nuestro estado de vida permitirá que disfrutemos de lo maravilloso que es estar en este planeta, de lo sublime que es ayudar a otros seres humanos a alcanzar estados superiores de conciencia que les permitan vivir mejor, sin sufrimiento; nos permitirá disfrutar de las relaciones con nuestros prójimos, parientes, hijos y nos será posible perdonar sinceramente con toda nuestra compasión y benevolencia las acciones cometidas por la ignorancia de otras personas.
El ser conscientes de nosotros elevará nuestra humildad, pues nos llevará a la tolerancia de los actos y creencias de otros seres, nos hará capaces de defender nuestros derechos sin caer en apasionamientos que degeneren en conflictos y por lo tanto en dolor y sufrimiento y nos hará coherentes con nuestra creencias y prácticas.
 Por todo esto, el conocimiento y dominio de nosotros mismos nos encaminará a la iluminación y llenará nuestra vida de amor y felicidad y al final de ella con seguridad nuestro karma se verá disminuido y nuestro renacer, en caso de darse, se hará en un mundo mejor, lleno de felicidad y, al menos con un menor grado de sufrimiento.

Muchas gracias y benditos sean.

cadhi2012@gmail.com.

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