LOS TRES ASPECTOS DEL
BUDA
“EL BUDA TIENE TRES
ASPECTOS: LA ESCENCIA O DHARMA KAYA; LA
POTENCIALIDAD O SAMBOGHA KAYA Y LA MANIFESTACIÓN O NIRMANA KAYA”
SUVARNAPRABHASOTTAMARAJA SUTRA
(EL SUTRA DE LA LUZ DORADA)
Buenos y sagrados días tengan
todos, la entrega de hoy tratará sobre los rasgos o características de El Buda. Esto es, la peculiaridad que hace única
a una persona, aquello que lo distingue de los demás, que lo hace diferente
entre la multitud y que lo hace único ya que solo los Budas pueden manifestar
estas peculiaridades. Este concepto igual se conoce como los Tres Cuerpos de
Buda.
De acuerdo con la tradición
Mahayana, de donde proviene este Sutra, una persona al alcanzar el estado de
iluminación, adquiere en forma inherente la comprensión de la existencia de los
tres cuerpos de un buda, estos cuerpos se manifiestan en diferentes niveles, lo
que no significa que sean separados sino que están íntimamente relacionados
unos con los otros. Este concepto está profundamente relacionado con el término
budista conocido como “es pero no es” y tiene mucha relación con la vacuidad,
aspectos necesarios de aprehender en nuestro recorrido hacia la iluminación, ya
sea en esta u otras existencias.
La particularidad de esta enseñanza
reside en un concepto sánscrito que se conoce como TRIKAYA, o los Tres Cuerpos,
en la que se demuestra que un buda o cualquier ser humano, al alcanzar la
iluminación en forma inherente verán al Buda, ya que el Buda es la Iluminación
misma.
El Buda, tiene en si tres
aspectos, dos de ellos se muestran en un plano de existencia sutil,
imperecedera, sin referencias temporales y que se encuentran en todos los seres
humanos como instrumentos de desarrollo,
mientras que el último se percibe en el mundo material, el mundo de la
forma.
En síntesis, los Tres Aspectos
del Buda son: Dharmakaya o cuerpo de la esencia; Sambhogakaya o cuerpo de la
Potencialidad y Nirmanakaya o cuerpo de la Manifestación
DHARMAKAYA O LA ESENCIA: Se considera que es la Sustancia de la
sabiduría misma, y, como sustancia no tiene color ni forma ni va o viene de
alguna parte por lo que se encuentra en todas partes, es en sí un aspecto no
originado e inextinguible, es decir sin principio ni fin, que se encuentra en
todas partes, en todo momento y en todo lugar y se accede a él mediante la
investigación de nuestro propio ser.
Este estado es inmutable ya que
es absoluto y no tiene límites creados por el tiempo o el espacio, es un algo
que no se puede definir ya que no existe forma de definir algo que no tiene
principio ni fin, y la única conceptualización posible se asocia con la pureza
primordial.
La esencia de Buda lo llena todo
y existe eternamente por encima del concepto humano o de las dudas acerca de
Buda ya que es sustrato de todo fenómeno manifiesto y de todo ser sintiente
siendo al mismo tiempo todo cuanto existe y nada a la vez.
Como se menciona al principio,
este cuerpo es parte de todo ser humano y está al alcance de su comprensión
siempre y cuando busque dentro de sí las respuestas, cuando se preocupe por
aumentar su contemplación o meditación acerca de los principios trascendentales
del ser, la persona irá descubriendo un universo maravilloso lleno de respuesta
a sus dudas, sus inquietudes y a la vez no le dirá algo que pueda escuchar o
ver.
La esencia de Buda nos rodea,
está ahí para los que buscan con diligencia el camino, para los que se esmeran
en generar méritos y utilizan las técnicas budistas para alcanzar al menos la
comprensión de lo incomprensible a través de la meditación. Esta enseñanza
tiene parecido a la utilizada por otras religiones con la diferencia que el
budismo tiene como basamento la intuición, la razón y conocimientos de cinco
mil años o más tiempo de antigüedad.
SAMBHOGAKAYA O CUERPO DE LA POTENCIALIDAD: Es a través de este
aspecto que el Buda se manifiesta para aliviar el sufrimiento humano, hace
votos, se vuelve asceta y revela su Sagrado Nombre.
Por medio de este kaya, se tiene
un contacto permanente e intrínseco con la realidad representando la propia
vacuidad, no como una negación de la existencia sino como un espacio de
conciencia trascendental abarcando todas las apariencias que puedan presentarse
en los aspectos masculino y femenino trascendiéndolos y dando lugar al
conocimiento último.
Es una representación de nuestra
capacidad de comunicación por lo tanto, es un medio hábil o vehículo de acción
convertida en una manifestación determinada expresada de maneras distintas.
La percepción de este kaya es la
de una mente purificada de todo condicionamiento limitante impuesto por la
ambigüedad de conceptos o por los apegos y deseos. Es una energía de la mente
propia insustancial y carente de existencia propia.
En este aspecto se tiene la
oportunidad de enriquecer el cuerpo material a través de la adquisición de conocimientos,
desarrollo de aptitudes o habilidades y un sinnúmero de cualidades de tipo
positivo que está al alcance de cualquier ser humano con la determinación
suficiente para, al menos, lograr el
control de las fuerzas de la mente conocidas como emociones ya que por medio de
las prácticas budistas se integra y potencializan las aptitudes cognitivas
Es este un medio que aumenta y perfecciona la
capacidad de comunicación del ser a través de la palabra, recordemos que en
sus inicios el budismo se transmitió de manera
oral, sin embargo, también se pueden perfeccionar otros medios comunicativos
como: la intuición, la telepatía, la clarividencia o el poder del silencio como medios no verbales.
Al desarrollar este cuerpo, los
seres humanos pueden realizar el deseo de todo budista de lograr beneficios
para los demás seres sintientes ya que al desarrollarse primero contarán con
los conocimientos necesarios para transmitir las enseñanzas del camino medio y
salvar por este conducto a innumerables seres del sufrimiento constante y
mejorar sus niveles de vida, compasión y sabiduría.
NIRMANAKAYA O CUERPO DE LA MANIFESTACIÓN:
Es en este cuerpo o nivel donde un Buda se materializa para poder transmitir
sus enseñanzas, donde es posible mostrar que el cuerpo es mutable y por lo
tanto envejece, enferma y muere, es donde se crea un vínculo físico entre el
hombre y la Divinidad o Buda.
Al ser un vehículo físico se
comprende la existencia de imágenes de
Buda que actúan como vínculos devocionales ya que el hombre necesita de
un medio que transmita esa devoción al ser objeto de su fe, ello no importando
a que creencia religiosa se pertenezca. Esta
es una necesidad, es algo innato en el humano, la certidumbre de dirigir su devoción a algo como una imagen,
un mandala, una escultura, y que esta devoción llegue hasta el objeto de su
actuar, además, sirve de estímulo en el momento de concentrarse en un mantra como
parte de una meditación verbal para
generar una energía mental que alcance la comunicación con el primer cuerpo o
Dharmakaya, es decir con el todo, con la esencia del ser.
Hasta la próxima
entrega, gracias.
cadhi2012@gmail.com